Descripción
Un catéter venoso central (CVC) es un tubo delgado que se introduce en una vena grande del cuerpo, generalmente en el cuello, el pecho o la ingle, y llega hasta una vena cerca del corazón. Se utiliza para administrar líquidos, medicamentos, transfusiones de sangre, nutrición parenteral y para extraer muestras de sangre. Los CVCs permiten un acceso vascular a largo plazo, evitando la necesidad de múltiples punciones.
¿Para qué se usa?
Administración de medicamentos:
Los CVCs facilitan la administración de medicamentos, incluyendo aquellos que pueden ser irritantes para las venas periféricas o que requieren una infusión continua.
Nutrición parenteral:
Permiten la administración de nutrición directamente al torrente sanguíneo cuando la alimentación oral o enteral no es posible.
Extracción de muestras de sangre:
Facilitan la toma de muestras de sangre sin necesidad de punciones repetidas.
Monitorización hemodinámica:
En algunos casos, los CVCs se utilizan para medir la presión venosa central, lo que ayuda a evaluar la función cardíaca y el estado de hidratación del paciente.
Tipos de catéteres venosos centrales:
Catéteres tunelizados:
Se insertan quirúrgicamente y tienen una porción que pasa bajo la piel antes de entrar en la vena, lo que reduce el riesgo de infección.
Catéteres con puerto implantable:
Consisten en un reservorio que se implanta bajo la piel y se conecta al catéter. Permiten la administración de medicamentos y la extracción de muestras de sangre de forma más discreta.
Catéteres no tunelizados:
Son catéteres de inserción percutánea que se utilizan para tratamientos a corto plazo.
Riesgos y complicaciones:
Infección:
La infección es una complicación potencial, especialmente con el uso prolongado del catéter.
Trombosis:
Se pueden formar coágulos de sangre en el catéter o en la vena, lo que puede bloquear el flujo sanguíneo.
Neumotórax:
En algunos casos, puede ocurrir un colapso pulmonar durante la inserción del catéter en el pecho.
Perforación de vasos sanguíneos:
En raras ocasiones, el catéter puede perforar la pared de la vena.
Desplazamiento del catéter:
El catéter puede moverse fuera de su posición original, lo que requiere su reposicionamiento o reemplazo.
Consideraciones:
La inserción y el manejo de los CVCs deben ser realizados por personal médico capacitado.
Se deben seguir estrictas medidas de higiene y asepsia para minimizar el riesgo de infección.
Es importante monitorizar regularmente el catéter para detectar posibles complicaciones.
La duración del catéter varía según la necesidad del paciente y el tipo de catéter utilizado.